Otro año de formación ha quedado atrás. ¡Las vacaciones de verano han comenzado!
Que sea un tiempo de descanso y renovación de fuerzas para cada uno de nosotros.
Les deseamos muchos hermosos encuentros con nuestro Jesús Misericordioso,
en el seno de la naturaleza y en el círculo de sus familias.
Les deseamos muchos hermosos encuentros con nuestro Jesús Misericordioso,
en el seno de la naturaleza y en el círculo de sus familias.
¡Nos vemos en septiembre!